8. Viejos amigos

Al observarlo me quedé quieta por unos segundos hasta que reaccioné levantandome de la banca y lo abracé con mucha alegría.

-¡Silver!, ¿Cómo es que estás aquí? ¿No estabas en Athena?- le cuestioné emocionada

-Tranquila Amy, sé que estás sorprendida pero ¿te parece bien que hablemos en tu casa?, quisiera explicártelo con calma- me contestó Silver al mismo tiempo que correspondía mi abrazo.

-Por supuesto, quiero saber que has hecho en estas semanas- le respondí sin soltarlo.

-Amy, perdona jeje pero ¿podrías soltarme? No quiero que lo mal interprete Blaze- me dijo mientras nos separábamos un poco.

-Claro, pero ¿Quién es Blaze?- dije algo confundida

-Una amiga, la traje conmigo, no podía dejarla sola, me gustaría presentártela, espera un poco, ¡Blaze puedes salir, ya es seguro!-gritó mientras volteaba

Me espanté cuando alguien bajó de un árbol detrás nuestro, me puse atrás de Silver, era una costumbre que tenía desde pequeña, al mirar bien, pude notar que era una gata joven, su pelaje era morado y ojos color caramelo, lucía muy linda en mi opinión, ella se acercó y se presentó.

-Hola, disculpa por asustarte, no era mi intención, pero estos días hemos tenido que desconfiar de muchos- me dijo con una cara seria a mi parecer.

-No hay problema, ¿En que tipo de situación están?, los veo algo apresurados- les dije con duda.

-Amy, te contaremos todo cuando estemos en tu casa, no estamos a salvo a esta hora- contestó Silver mientras miraba a todas direcciones.

-Entiendo, bueno, mi casa no está lejos, nos tomará unos minutos llegar, en el camino pueden contarme que ha estado pasando- contesté mientras empezaba a caminar.

Los tres nos dirigimos a mi hogar, durante el trayecto Blaze estuvo callada observando a nuestro alrededor mientras que Silver me explicaba la situación de Athena, al parecer un ser extraño, un tipo de masa oscura  la cual había aparecido hace una semana en la ciudad, todos estaban sorprendidos, después de unos minutos, esa cosa habló, les advirtió a todos que su fin se acercaba, sólo les quedaba máximo dos meses para dejar aquel planeta o sufrirían las consecuencias, habría una invasión, sin dar a tiempo de preguntar esa masa desapareció dejando confundidos a los habitantes.

Así que Silver decidió venir a verme y pedirme ayuda para estar listos y combatir, sin omitir que de camino a aquí varias veces se toparon con personas no muy buenas, obligándose a combatir y temer por que el responsable de la invasión apareciera. 

Llegamos unos segundos después de que terminaran de contarme todo, entramos y les ofrecí sentarse en el sofá mientras iba a la cocina por algo de beber.

Al regresar a la sala me quedé enternecida con la escena que veía, Silver estaba en el sofá individual dormido, con su cabeza de lado y su cuerpo estaba relajado, en el otro sillón más largo se encontraba Blaze acostada y  ronroneando, ambos me parecieron tiernos, supongo que fue muy agotador el viaje, no quise despertarlos así que fui por unas mantas y los cubrí con delicadeza. Después de revisar que estuvieran cómodos me dirigí a mi habitación y me puse mi pijama, cepillé mis dientes y finalmente me acosté en mi cama cayendo rendida al cansancio, sin antes escuchar ciertos susurros en mi cabeza.

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¡Hola! Soy la autora jaja bueno antes que nada disculpen por no seguir corrigiendo los capítulos que ya habían sido publicados, es que ahora tengo establecido que rumbo tomará este blog espero sean pacientes y sigan leyendo.
Les recomiendo (si es que son nuevos) leer desde el primer capítulo ya que algunas cosas han cambiado en la historia.
Espero actualizar pronto, pasen felices fiestas.
Hasta la próxima <3

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